Huracán.

Una tremenda tormenta se había iniciado dentro de su espíritu, y se pensaba que todavía quedaban pescadores en alta mar que no habían regresado a puerto. No existía todavía organización alguna para ver si de veras faltaba alguien, organizar un rescate, y si no, tranquilamente bajo techo esperar que amaine. Porque siempre existiriá una mañana…