Un eclipse lunar cualquiera

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Hace poco hubo un eclipse. Y otro, y otro y otro. La verdad, es que me sentí un poco abrumado por tanto eclipse… dejénme tranquilo con mi normalidad de la noche y del día, cortenlá. Así que te juro que me dio un poco lo mismo el eclipse lunar total de la totalidad cósmica y chigual pascual. Le dieron harta cuática en el instagram, sobretodo las cuentas brujísticas chamánicas neohippie chanchi wawi love forever, aquí y ahora y weas.

Sobretodo esas.

Momento de reconciliación interior, lados sombríos, emotion holders y volá. Se fueron en esa, y como yo andaba un poco chato de la ondi «Creo pero No Soy», como que me dieron ganas de acostarme y pesqué re poco la verdad. Pero dada la curiosa curiosidad del que está visualizando un ciclo, me consideré un poco bestia, troglodita y poco navegante de los femónenos celestiales.

Básicamente, un hueon de mierda.

– Y muy tranquilo con serlo, si te soy sincero –

Como somos pocos, nuestra influencia pedante y miserable, contraresta y equilibra este compasivo mundo de bondades, poblado en su mayoría por puros seres puros que puro construyen paz. No como uno, que anda siempre buscando donde portarse mal. Atento ahí a las oportunidades que me presenta la vida para aprovecharme de alguien y tomar algo en mi beneficio exclusivo.

Soy presa fácil de las tentaciones.

Por eso me vine a vivir a la montaña, donde nadie llegue, acompañado por una perrita que lo primero que hizo, fue tomarse la calle como suya y no deja que nadie pase sin rayarle la cancha.

En la que se va…

Somos el uno para el otro.

Además, estaba convertido en una Barbie porque ese mismo día subí el cerro en la oscuridad para ver el amanecer desde allá arriba y quedé un poco shopico. Por eso no estaba ni ahí con el eclipse nuclear. Pero me dije ya, como tan weon, pa que tanto. Relaja… Hoy día va a pasar algo en el cielo ¿No te asombra ni siquiera el trabajo que hubo que hacer para predecir algo como esto?

IMBÉCIL.

¿Cómo tan bestia?

Y como andaba con ese tema de los ciclos y locuras raras que se me están desenrredando de la cabeza, vomitandome encima y dejándome la cagá en la ropa… mishhh pensé, Modo Hada es lo más conveniente.

Así que cambié la mentalidad, elevé mi vibración y envolví mi maléfico cuerpo en blancas túnicas celestiales. Me pinté la cara, me coloqué plumas, puse mantras en la radio y que tanto? Ingerí sustancias psicotrópicas activas, me bañé con espuma, hierbas y cristales, medité con las manos como un buda, asi como se ven esos gorditos en las caricaturas y me escribí una frase pachamama mistic drim, así bien tatuada en la frente, tu no mas cachai.

Así tal cual.

Ah, y la selfie para el instagram, obvio.
Todo esto está en mis historias.
Comparte, da tu laik.

Así que eso po, se me pasó lo bruto y me convertí en el aburrido angel de la perfección cósmica y de la unidad celestial hermanito y volás de esas.

«Ya po, será.
Vamos a ver que tanto show
con esta luna»

– exclamó el angel.

Y como tuvimos hartos días bonitos, y era el último día de sol antes de que empezaran de nuevo las lluvias, tenía caleta de palitos secos que había apartado con toda la sabiduría que el malvado Judas había susurrado para mi, así que me díjeme:

“Le vamos a hacerle una fogatita,
y ya que estamos en eso,
vamos a aprovechar de hacer
una ceremonia del fuego
así con rituales, sacrificio de guagua
y toda la pescá”.

Llama primordial, no me wei.

Yapo, recogí todos los palitos, las astillitas las tenía, todo en orden para un fuego perfecto, una maravilla. El mejor fuego de dio, oigame usted. Pero mira, yo reconozco mi inhumanidad y mi anormal capacidad para aguantar temperaturas extremas. Lo que pasa es que he pasado por experiencias de sobrevivencia tan brígidas, que a mi me da la impresión de que se me quemaron los sensores de la temperatura.

Uf te contara por las que he pasao.

Y así y todo, trigidísima la noche. El fuego lo dio todo y más, pero yo no hallaba la manera de arrucucucarme entre las bracitas para no sentir que me estaba llamando la luz al final del tunel.

Así como le digo, usté no me cree.

Y como la misión consistía en llegar a la mañana, no me quedó mas que vestirme para la Fiesta de los Osos Polares. La noche estaba muy clara. Demasiado clara. Tan clara que se ve como de día, pero la diferencia es que no se ven colores. Todo es una mezcla de blancos y grises bien oscuros pero en general, se ve todo super claro, es una cosa extrañísima.

Terrible de clara.

Así que me quedé piola ahí echadito al lado del fuego, esquivando el humo y haciéndome concha el tratamiento para el pelo que me está aplicando mi equipo de estilistas. Quedó la grande, el productor me pidió una reunión, seguramente le dijeron algo al director, uff todo un tema.

Pero filo, porque cuando pasa algo como esto y te toca llenarte el pelo de humo y caca, y ya lo sueltas y te entregas a esa magia, llega esa aceptación. Como que ocurre una liberación. Ya no importa, es como que fueras caminando super terrible de lejos y llevai una mochila con caleta de cosas, pero llega un punto en que una de las cosas ya no puede seguir ahí. Y cuando ya te decidiste que tienes que dejarla, es una liberación tan bacán de poder caminar solo con las cosas que verdaderamente necesitas.

Pasa con todo, con los zapatos, con el pelo, las rupturas amorosas, la muerte… Yo te lo digo, en serio. Cuando uno suelta algo, ufff es el cielo mismo oiga.

Por ejemplo yo mismo durante el eclipse con el fuego. Primero viene la ropa que se pasa de humo, si uno suelta de verdad… ¿que importa que se manchen los trajes hecho a mano y con telas finas? ¿Y que? Hace frío, tienes que revolcarte cerca del fuego, entrégate a la caca.
Si no lo haces, mañana mismo apareces en las noticias de la Bio Bio.

Que indignidad más grande.

Na que ver.

Cuando llegas a ese punto, literalmente estás entregado. No hay más, llegaste al tope del soltar. Es la plenitud más total a la que puede acceder un ser humano. Ya no te importa nada, eres un despojo de la sociedad y solo de ti y de tus buenas o malas costumbres, depende de que no te hagas caca. Pero en esas condiciones tan notables…

¿Te haces caca y qué?

Tu cara llena de hoyín, humo, tu pelo lleno de hojas, tierra, y tu ropa, manchada entera con barro, mugre y hecho caca.

Es la gloria.

No se puede más.

Yo miraba mis pantalones entremedio de la tierra, mis zapatitos apoyados en las rocas del fuego, mi parquita, dándolo todo y no importa: Estamos apañando todos aquí en el frío. Sentí cariño por mis cositas. Mis compañías, me aguantan harto. De veras que me aguantan esta clase de locuras, soy un agradecido de ser tan aguantado.

Las condiciones más duran y ahí están.


Y están para revolcarse con ellas a enfrentarse contra todos los elementos. Con sol, nieve, lluvia, calores, fríos toda la wea. La roca, el mar, el barro, golpes, arañones, desgarros, pelones, all inclusive. Todo eso viene. Caídas, arrastradas, rajones. Cacha. Todas estas cositas con las que me he estado revolcando por las dificultades de la vida, todavía me apañan.

Igual las cuido, porque les tengo cariño. Pero me arrastro como una maldita sabandija a través de los elementos con ellas encima: Pantalones, zapatos, cámaras fotográficas, termos, lápices, mascotas, amigas.

Dándolo todo por la vida.

Me apañan.

De todas maneras soltar la elegancia y la fineza es lo más recomendable, yo creo que son como 3 meses de terapia, así pa partir no mas, porque de ahí de pa delante…. como avión. Hay que buscar eso si, una elegancia roída y miserable que te permita arrastrarte en las peores condiciones pero sin perder el estilo.

Para entrar en materia, te recomiendo soltar la fineza, hazme caso, haz una fogata durante un eclipse lunar con temperatura bajo cero y revuelcate miserablemente de frío junto al fuego.

Sanador.

Firmao.

Mira, yo estaba indignamente revolcado ahí en la actitud mas lamentable de los últimos años, y a la vista de todos porque estaba entero de iluminado por la luna llena, así modo show, pero derrepente algo cambió, porque dejé de sentir tanta vergüenza por existir en un estado tan deplorable y fue ahí cuando me di cuenta que era porque se estaba oscureciendo y por eso ya estaba pasando más piola.


«De veras que había un eclipse lunar!»

Me acordé de mis plumas y ropas celtas, marcajes egipcios y el tatuaje en mi frente. Obvio. Ahora estaba todo claro, o sea, oscuro.

Tu cachai.

Y ahí me quedé junto al fuego mirando el cielo, viendo como la Tierra se tragaba a la Luna y la Luna le ponía weno para no ser tragada por la Tierra. Brillaba con más ganas la Luna mientras más pelea le hacía la Tierra.

Tremendo.

Mientras tanto, el fuego me daba las tremendas lecciones de vida. Tanta maravilla que enseña el jefe, se pasa, tremendo maestro. Y yo como estoy atento y soy un buen discípulo de los pulentos, aprendo rapidito y aplico bacán. Así es como me fui convirtiendo en un gran arquitecto del fuego, pintado para tiktoker y cosas de esas.

Por su parte, a la Luna no le quedó mas remedio que aceptar la sombra que la cubriera. Así que después de su estertor final, la noche entera se desbloqueó y las penumbras lo invadieron todo. Todas las sombras emergieron de sus escondites ahora que no había luz que las frenara.

Fue brígido.

Y en el cielo apareció el millón de estrellas que se esconde de la Luna Llena cuando brilla entera de cuatica. Pero ahora que no estaba, uuuhh chipe libre pa la sombras. Pero sabes que? Siempre hay luz, siempre. Hay que saber buscar, porque cuando no se ve luz con la mirada, es uno el que irradia luz desde el corazón, y esa luz no puede verse con los ojos.

Así que antes de adaptarme con los sensores, me moví como un imbécil entre las sombras, sin ver ni raja, tropezándome con todo, borracho, un tarado. Me caí, di jugo. Pero cuando espabilé, rapidito me convertí en un super seco seyayin master drim non flow yipiwow.

De los wenos.

3 o 4 cuatro veces, ya ni se, tuve que cambiar la batería de la cámara que estaba dando la vida ahí en el patio sacando mil fotos debajo de una toalla. Y lo hice todo con fineza, con elegancia.

Felino, vio?

Pero felino del bacán, del estilozo, no como ese gato gordo que se la pasa echao. Entero pulento moviéndome en la noche. En la nada las cosas no existen, se van materializando creándolas con la mente en la intuición de la propia luz sobre el lienzo cósmico de la consciencia.

Así pero pro, pro, pro.
Creando la realidá fíjese usted.

Un ninja en la noche, ningún ruido. Un maestro de las sombras, una pantera que se disuelve en las penumbras.

Superpoderes de la oscuridá, miau.

Traje apretao y todo.

Ahí lo vas a ver publicado en un reel.
Me voy a hacer un tiempo para editarlo.
Deja un comentario de como se me ve la cuerpá con el traje de ninja.

Siguiendo con la historia, el poder felino es el tremendo superpoder. Saber moverse por donde está oscurito, es la media ventaja. Nadie sabe por donde vienes. Bueno, hasta que te topas con otro gato.

Y ahí cambia un poco la historia.

Yo me había comprometido a amanecerme, era una cosa así como un juramento de sangre pero con la sangre del notario, una cosa un poco compleja de explicar. Pero hizo tanto frío, tanto frío, que llegó un punto en el que me dije, no, esto es mucho. Me voy a acostar porque no aguanto más. Pero yo tengo dos voces internas. La que me odia me dijo: «Eres una mierda y no vales nada, tirate al río, es lo mejor que puedes hacer». Pero la otra, la que me ama me dijo: «Pobre weon, eres un imbecil de mierda«.

No mentira, me ama mucho.
A veces incluso me toquetea.

Si porque tengo una voz interior que me ama terrible cuatico y me tira caleta de buena onda y gran energía. Así que gracias a ella que pude aguantar toda la noche porque me apaña caleta, lo que si es que no siempre fue así, porque antes de aprender a escucharla… uf… imaginese las cosas que me pasaban por la cabeza…

Madness, ya cashai.

Y de todo esto salió el video po, de amanecerme como un tarado cuando las condiciones estaban funestas. Desde que empecé a grabar hasta que se llenó de luz, me pasó de todo. Lloré, me caí, bailé en pelota, llamé borracho a mi ex, me vinieron a callar los vecinos y también medité, todo eso.

Estuvo bien entretenida la noche.

Cachai que en el video, al final todo se pone blanco porque se llena todo de luz? Así mismito fue cuando apareció el solsito en la mañana. Fue la media salvá. Con el maestrito fuego estuvimos sosteniendo toda la noche. Tremendo compañero para aprender a vivir. Entre los dos nos cuidamos.

Hay cariño ahí.

Imagínate lo que me pierdo si me quedaba acostado.

Como estaba registrando todo esto con mi camarita, junté 1904 fotos desde las 9 de la noche hasta las 8 de la mañana y con ellas hice ese video. Si te interesa saber como lo hice, se llama Time Lapse. Tengo un podcast y un artículo donde lo explico muy bien, para que puedas hacer uno tuyo también.

Te tinca?

Yapo.

¿Tienes algo para decirme?